Homenaje a María Luisa Lizárraga por Pedro Rosas

Dentro del ciclo de homenajes póstumos en piano a la sinaloense Ma. Luisa Lizárraga Saucedo (1936-2011) que se viene celebrando al interior del CIE, Pedro Ignacio Rosas Medina tendió buena música y talento en el último, consumado el pasado 18 de agosto en punto de las 18:00 horas. Con un público conformado de poco más de 40 personas que se dieron cita en el Lobby Principal del Centro de Innovación y Educación, lugar en donde mora el piano negro Balwin concert grand modelo SD-10 de la celebrada e instrumento de uso para los recitales de este tipo; y que además, en su momento será trasladado al Teatro de la Ciudad.

Bajo la tutela de Kevin Jázzer Algándar el artista se ha desarrollado como pianista, juntos prepararon un repertorio nutrido, en base a piezas de Mozart, Beethoven, Chopin, Rachmaninoff, Grieg y Ponce. Todo lo cual bastó para una hora de concierto, uno que cautivó la atención de los presentes.

La primera pieza de la noche fue Sonata No. 13 K. 333 en si bemol mayor, con su tres movimientos Allegro, Andante cantábile y Allegretto grazioso del compositor austriaco Wolfgang Amadeus Mozart, con una duración de 22 minutos, algo larga pero eso sí, llena de pasajes y deslices sobre las teclas del piano; Sonata (también llamada Sonata patética) No. 8 Op. 13 en do menor y sus tres movimientos Grave/Allegro di molto e con brio, Adagio cantábile y Ronda Allegro de Ludwig van Beethoven, reconocidísimo músico, compositor y director de orquesta.

Momento después de un breve intermedio el pianista mochitense salió para tocar Prelude Op. 28 No. 4 de Frédéric Chopin; luego siguió con la composición rusa Prelude Op. 3 No. 2 en do menor de Sergei Rachmaninoff. Ya entrada la recta final, Pedro Rosas se dispuso a interpretar Improvisación sobre un tema folclórico noruego Op. 29 de Edvard Grieg; la Suite cubana del compositor mexicano Manuel M. Ponce marcó el cierre.

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