Avanzan los trabajos de demolición del Estadio Emilio Ibarra Almada
Por: Alejandro BojórquezCon la demolición de la tribuna central dio inicio la segunda etapa de trabajos de modernización del Estadio Emilio Ibarra Almada. En una visita guiada acompañado por los medios de comunicación, el presidente del club Ing. Joaquín Vega Inzunza, comentó que la obra va en tiempo y forma con la proyección de ser terminada en la tercera semana de septiembre.
“Estamos muy contentos de ver que esto es ya una realidad… por supuesto hay sentimientos encontrados de saber que se acaba un estadio con muchas buenas historias, pero nos reconforta saber que lo que viene será mejor para nuestro equipo y nuestros aficionados”.
En el inmueble ya se observa un 20% de avance en lo que respecta al área por demoler además de haberse retirado ya el 75% del techo. Es importante recordar que además de las butacas y luminarias hay mucho material que está siendo entregado al ayuntamiento con el fin de que puede reutilizarse.
Al día de hoy se cumplen poco más de dos meses de trabajo y en el área de bleachers prácticamente se ha terminado de colocar los cimientos para las nuevas gradas de concreto, lo que en conjunto promete que en el próximo mes de octubre los aficionados cantarán el playball en uno de los estadios más cómodos y bonitos del pacífico.
Un poco de historia del Emilio Ibarra Almada: Se vivía la década de los años Treinta, la joven y risueña ciudad de Los Mochis recibía al beisbol en esbozos, en juegos locales y regionales. ¿El escenario? El entonces estadio "Iturbide", que llegó a ser sede de varios duelos ante selecciones de otras ciudades de Sinaloa y Sonora.
Es en 1947 cuando Los Mochis ingresa a la entonces Liga de la Costa del Pacífico. La urgencia fue disponer de un nuevo inmueble. Así es como surge el estadio "Mochis", un inmueble con capacidad para tres mil personas y que alojó al beisbol profesional durante cerca de tres décadas.
En 1962, año en que ingresan los Cañeros a la entonces Liga Invernal de Sonora, el estadio "Mochis" es sujeto a una urgente remodelación, que lo dejó con una capacidad para 6 mil fanáticos. El 10 de Octubre de 1963 se jugó el primer juego nocturno al habilitar el coloso con sistema de alumbrado.
Nueve años después, el 6 de Octubre de 1972, la casa de los Cañeros fue bautizado con el nombre que aún conserva, "Emilio Ibarra Almada", en honor al directivo que promovió el ingreso de Los Mochis al beisbol profesional.
Por Alejandro Bojórquez| Cel 6681 12 95 00