XIX Edición

Desfile conmemorativo al Día del Trabajo

Por: Steve Bojórquez

Como todos los años, el día 1ro de mayo se realizó el desfile conmemorativo al “Día del Trabajo”, recordando a los mártires de Chicago de 1886, la huelga de Cananea en 1906 una de las huelgas más importantes del siglo XX en México, este fue uno de los grandes antecedentes de la Revolución mexicana, y es una de las experiencias de organización obrera más ejemplares.

En nuestra ciudad, miles de obreros de alrededor de 50 organizaciones e igual numero de contingentes, salen a las calles para conmemorar este día, día que dieron apertura a los derechos de los trabajadores, de prestaciones sociales para ellos y sus familias, lo que se suponía lo mejor o condiciones mas humanas para las familias de México.

¿Pero qué sucede realmente?
Estos desfiles año tras año, sirven como vitrina para que los obreros se muestren inconformes, molestos, dañados en su patrimonio de trabajo, pero esto tiene una raíz más allá de los actuales gobiernos, recordemos…

El articulo 123 de la Constitución Política de los Esrtados Unidos Mexicanos en su fracción VI dice:
“Los salarios mínimos generales deberán ser suficientes para satisfacer las necesidades normales de un jefe de familia, en el orden material, social y cultural, y para proveer a la educación obligatoria de los hijos.”

Lo cual, hace años dejo de ser, hoy con un salario mínimo no alcanza ni para las necesidades básicas, por lo que el pueblo nunca será capaz de alcanzar sus necesidades, ni las más básicas, los obreros, los que no son jefes, ni empresarios ni políticos, siempre estarán en desventaja, en necesidad permanente.

¿Sabías que los trabajadores ni siquiera saben el contenido de los derechos básicos del trabajador del articulo 123 antes mencionado, ni mucho menos la Ley Federal del Trabajo, donde están numeradas las obligaciones de los patrones y trabajadores, así como sus beneficios?

Es común en Los Mochis conocer trabajadores que tienen años que no tienen seguro, en zapaterías grandes no tienen días de descanso, en tiendas de telas no cuentan con sillas o bancos para sentarse las cajeras, lo cual es un obligación patronal, y lo peor, discriminación a las mujeres como en conocida línea de paquetería que solo aceptan a las más “guapas” según sus estándares y tienen que salir del trabajo tan pronto se casan o embarazan y estas últimas, en la mayoría de los negocios son corridas terminando con su derecho universal a ser madres.

Sin lugar a dudas no tenemos en México las condiciones, ni los medios por el momento, por lo que los desfiles año tras año, serán una afrenta con quien este en el poder, la ironía es que esos mismos sindicatos, fueron los que los pusieron a esos hombres de cuello blanco a través de generaciones, sirviéndose de la ignorancia de sus miles y miles de agremiados..

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