La Peregrinación Marista llena las calles de Los Mochis con un mensaje de paz y esperanza
Este jueves 5 de diciembre, el Centro Escolar del Noroeste (CEN) Marista llevó a cabo su tradicional Peregrinación Marista, recorriendo las calles de Los Mochis desde la avenida Leyva hasta el Santuario de Guadalupe. Toda la comunidad Marista, desde preescolar hasta bachillerato, acompañada por maestros y padres de familia, participó en esta emotiva manifestación de fe y unidad, acompañados de los Danzantes del Tepeyac.
Con el lema de que la Madre de Dios brinda fe, fortaleza y esperanza en estos tiempos difíciles, los asistentes llevaron consigo un paño blanco como símbolo de su compromiso con la paz, tanto en la región como en el mundo. Este gesto buscó visibilizar el anhelo colectivo de construir un entorno libre de violencia y lleno de armonía.
Recordamos las palabras que la Virgen de Guadalupe dirigió a San Juan Diego resonaron con fuerza:
"Oye y ten entendido, hijo mío el más pequeño, no dejes que nada te asuste ni te aflija, que no se turbe tu corazón… ¿No estoy aquí, yo, que soy tu madre? ¿No estás bajo mi sombra? ¿No soy yo tu salud? ¿No estás por ventura en mi regazo?"
Estas palabras cobran especial relevancia en el contexto actual, marcado por la inseguridad y las hostilidades que afectan tanto a nuestra región como al mundo entero. La Peregrinación Marista no solo rindió homenaje a la Virgen de Guadalupe, sino que también se erigió como un llamado a renovar la fe y a trabajar juntos por un futuro más pacífico.
El evento culminó en el Santuario de Guadalupe, donde los asistentes participaron en un momento de reflexión y oración, reafirmando su devoción y compromiso con los valores que promueve la comunidad Marista.
La Peregrinación Marista es un recordatorio de que, incluso en los momentos más oscuros, la fe, la unión y la esperanza pueden iluminar el camino hacia un mundo mejor.
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