Y ahora, ¿cómo saludamos? Consejos del Instituto Nacional de Salud Pública
Con el brote mundial de coronavirus COVID-19 las comunes formas de saludar se han visto afectadas por el miedo a contraer la enfermedad. Rechazar una mano tendida -sin pasar por grosero-, evitar el beso y el abrazo, o saludarse con los pies, son los nuevos comportamientos sociales que se están adoptando en varios países del mundo frente a la epidemia.
Los besos amistosos se han convertido en un nuevo dilema, especialmente en el efusivo sur de Europa y en Latinoamérica, donde quizás tengan que cambiar las costumbres. Pero incluso los norteños más reservados están lidiando con renunciar al sagrado apretón de manos.
Ya se han mostrado varias imágenes de líderes políticos mundiales evitando darse la mano y utilizando otros gestos para saludar.
En México, el Instituto Nacional de Salud Pública comparte a través de sus redes sociales y página oficial un cartón que nos invita a evitar el contacto físico al momento de saludar y aprovechar otras vías para compartir el fraternal saludo o despedida sin ponerse en riesgo ante el contagio por COVID-19.
En Pekín letreros rojos piden a la gente no intercambiar apretones de manos sino a unir las propias en señal de saludo. Por altavoces, se recomiendan hacer el gesto tradicional gong shou, palma en el puño, para decir hola.
En Wenzhou, una de las ciudades más afectadas, dos oficiales rechazaron sonrientes la mano que les tendía un periodista, prefiriendo intercambiar un "toque de codo".
En tanto, en Irán, donde el lema "No te doy la mano porque te quiero" se multiplica, se desarrolla una manera de saludarse entre hombres (en la República Islámica no es conveniente estrecharse la mano entre personas de sexos opuestos) que consiste en adelantar el puño cerrado hacia el otro, que hace lo mismo sin que los dos puños entren en contacto.
Por Steve Bojórquez 6681 12 95 00