Entrevista con el Sr. Martín Reyes Rúelas, Ganadero de San José de Ahome
Sinaloa es reconocido como uno de los principales estados productores de alimentos de México, y la calidad de nuestros productos es valorado tanto en el mercado nacional como internacional.
Entre las actividades productivas del estado, la Agricultura y la Ganadería han sido y son fundamentales para el desarrollo de Sinaloa; ya que además de tener una participación relevante en el PIB del estado genera fuentes de empleo y divisas derivadas de las exportaciones agroalimentarias, sirviendo como motor económico del estado.
Esta semana nos entrevistamos con el Sr. Martín Reyes Ruelas, ganadero oriundo del ejido San José de Ahome quien a escasos metros del poblado tiene ubicado su corral de vacas el cual tuvimos a bien visitar este domingo 18 de octubre, recién salido el sol aprovechando la mañana para la ordeña y continuar con sus actividades en el tenor del mediodía.
Para Martín, la ganadería es un negocio que ha dejado de ser negocio, para ellos, el bajo precio de la leche, el becerro y la vaca ha impactado directamente en su economía y producción, en palabras de él “los precios no nos ayudan, está bajo el precio de la leche, el becerro y la vaca, uno lo tiene que hacer porque lo tiene de muchos años atrás, uno tiene que arriar”.
Los días para él inician a las 5h de la mañana, un trabajo heredado que está tan arraigado, que ya no es por negocio sino por costumbre, a él el litro de leche se lo compran a $5 cinco pesos, mientras que en el mercado lo venden a $20 veinte pesos. La vaca se la pagan a como el ojo lo ve, si es delgada, medianita o gorda. Con más de 50 años en los corrales, actividad que sus padres y abuelos realizaban.
Un futuro incierto para él y su familia, clama por ser escuchado él y cerca de cien o más pequeños ganaderos y productores de leche de la región, pues a palabras de él “hay apoyos, el problema es que no llegan hasta donde tienen que llegar” y son los mismos grandes productores, quienes no lo necesitan, quienes acaparan aquello.
En esta temporada que no llovió, uno que no tiene pradera es difícil costear el pastoral, pues el costal de alfafa ronda en los $3000 tres mil, $4000 cuatro mil que se traduce en la siembra de una hectárea, sin embargo, el bajo costo del litro de leche y el mal pago de la cabeza de ganado.
Su clamor es que se valore el trabajo de uno, que se vea realmente el trabajo de uno y que si no los voltean a ver desde el gobierno o los sectores preponderantes en el mercado, esto va a desaparecer, y si esto desaparece, ellos que harán… ¿Qué harán sus hijos?
Por Steve Bojórquez 6681 12 95 00